“Paysandú atraviesa una de las crisis laborales más grandes de los últimos 20 años. A la falta de empleo se suma la precarización del mismo y la desidia del gobierno nacional que, en más de 4 años, no ha dado señales de que le preocupe esta situación”, dijo Natalia Martínez, edil por el Partido Comunista – Frente Amplio. Lamentó que tanto el gobierno nacional como el departamental evidencien no estar a la altura de la situación y permanezcan sin “dar señales claras” como podría ser la inversión en obra pública “que dinamice la economía”; “por el contrario, este gobierno ha venido al departamento a inaugurar cosas que nunca funcionan. Por ejemplo el portacontenedores que trajeron prometiendo desarrollo, con grandes discursos de mucho ruido y pocas nueces, a un puerto que han dejado en ruinas y totalmente ocioso”.
Martínez, que sería candidata a diputada y cuyo nombre se considera para las elecciones departamentales de mayo del año que viene, criticó a los políticos de los partidos que integran la coalición de gobierno “que de cara a la campaña electoral intentan despegarse mostrando preocupación por la temática no habiendo hecho nada en más de 4 años de gobierno, lo que a mi humilde saber y entender no es más que demagogia pura y dura”.
Recordó cómo en el quinquenio anterior el actual intendente, siendo entonces diputado, reclamó “con mucha insistencia” que Paysandú fuese declarado en emergencia laboral, cuando el índice de desempleo estaba en el 6,1%. “Hoy con más de 100% de crecimiento de desempleo no se lo escucha pronunciarse de forma clara y honesta”.
“Casi el 40% de los sanduceros” está afectado por el desempleo, la informalidad y la precarización y “el discurso de desarrollo” del gobierno “se cae con cada informe del Instituto Nacional de Estadística”, sentenció.
Reclamó que la “situación agobiante” para tantas familias se aborde “como un tema grave y urgente” a partir de “un gran dialogo social e interinstitucional” pero reconoce que no ve en el Partido Nacional “compromiso para dicho diálogo”.
Recordó que la pobreza en Uruguay “tiene cara de mujer y de niña” y mencionó el retroceso experimentado en estos años “en políticas públicas con perspectiva de género”.
Para Martínez hay una “desastrosa gestión de los recursos” departamentales con una Intendencia “que gasta mucho y gasta mal”, con un déficit acumulado de más de 25 millones de dólares; la incapacidad de generar instancias de diálogo entre los distintos niveles de gobierno, “como ejemplo tenemos lo que pasa en el Municipio de Porvenir”, y una actitud “de espaldas al pueblo y así es más difícil encontrar caminos que ayuden a solucionar el enorme problema del desempleo”.
Finalmente reivindicó el programa de gobierno del Frente Amplio como alternativa “a este gobierno neoliberal» que aplicó “recortes presupuestales en áreas sensibles que sólo agudizan la crisis laboral que hoy atraviesa nuestro departamento”.
