Aporte del escribano Leonardo Rivero
Para algún lector que aún no conoce el origen del movimiento Mayo Amarillo recordemos que éste nace en Brasil con el objetivo de hacer un llamado de atención a la sociedad sobre la siniestralidad vial que año a año deja un alto número de fallecidos y lesionados.
En 2015 se consolidó el Mayo Amarillo en todo el mundo, con innumerables acciones y adhesiones en más de 20 países y la participación masiva de toda la sociedad: ciudadanos, empresas, entidades, organismos públicos y privados, unidos en pro de un trabajo en conjunto para la disminución de la siniestralidad vial, sus lesionados y sus fallecidos.
Nuestro país se suma al movimiento en el año 2016 con una serie de acciones, intervenciones y eventos organizados por la UNASEV (Unidad Nacional de Seguridad Vial), Gobiernos Departamentales, organizaciones sociales y no gubernamentales, aseguradoras, etc., con el fin de concientizar y sensibilizar a toda la sociedad sobre las graves consecuencias de los siniestros de tránsito, tratando de lograr la reflexión y cambio de actitud para superar este flagelo mundial que hoy padecemos.
Como es sabido, la Administración anterior, que condujeron Guillermo Caraballo y Mario Díaz, logró un reordenamiento general del tránsito en la ciudad y todo el departamento con objetivos y lineamientos claros, partiendo del recupero de la muy deteriorada institucionalidad de la Intendencia, situación que hoy asoma nuevamente, lo que significó el cumplimiento del compromiso asumido con la sociedad en la campaña electoral.
El mejoramiento la movilidad urbana con más seguras vías de tránsito, en seguridad y educación vial, mayor fiscalización, gestión, coordinación y articulación con organismos públicos y/o privados, descenso de la siniestralidad vial y orden administrativo, entre muchos otros puntos, hicieron que aquella Administración sea referencia a nivel nacional.
Y en lo que refiere a campañas nacionales en materia de seguridad vial la Intendencia dijo presente como la mayor Institución pública del Departamento, plegándose a las mismas con actividades organizadas por la propia UNASEV, como el organismo estatal que tiene como función proponer, impulsar y ejecutar las políticas en seguridad vial y tránsito; pero también con su propia iniciativa, con estrategias, intervenciones y campañas buscando el involucramiento y sensibilización de toda la sociedad en esta problemática que se “roba” año a año tantas vidas de uruguayos y uruguayas.
En nuestro país, y este año con el slogan “La Paz en el tránsito empieza contigo”, Mayo Amarillo es un movimiento que lejos estuvo de pasar inadvertido en otros Departamentos, para otras Intendencias, Municipios, Juntas Locales, ASSE, organizaciones de la sociedad civil, que bien han sabido programar y llevar adelante acciones e intervenciones presenciales y virtuales con adultos y escolares, así como pautas publicitarias, actividad en redes sociales, charlas concientizadoras, entre otras acciones.
Pero, es muy bueno reconocer que para algunos Gobiernos Departamentales que consideran que seguridad vial es una problemática mundial, que nos involucra a todos y que depende de cada uno de nosotros el adecuar y modificar nuestras conductas responsable y solidariamente. Gobiernos Departamentales que utilizaron nuevamente esta instancia porque creen que nunca está demás tener un momento de reflexión, de concientización, sobre esta otra pandemia, la de los siniestros, lesionados y fallecidos en el tránsito. Sin embargo, en nuestro Departamento, desde la Intendencia o desde la propia Dirección de Tránsito, ya no es noticia que no se haya hecho ni siquiera mención sobre la campaña ni en sus redes sociales ni en su página web oficial, tal como si en el “calendario municipal” no existiese el mes de mayo, mes especial para la seguridad vial. Aún así y en forma acertada, ASSE por su propia iniciativa y sin apoyo ni difusión, tiene prevista una charla sobre seguridad vial en un liceo de nuestra ciudad por parte del doctor Mauricio Grassi.
No nos asombra ya y es una pena realmente que no se haya dado continuidad al trabajo que año a año se llevaba a cabo por parte de la anterior Administración no sólo en mayo, sino en diferentes oportunidades y en diferentes meses del año, como por ejemplo con las campañas que se daban al inicio del año escolar, por el Día Mundial sin siniestros de tránsito, Día Mundial en recuerdo a las víctimas en siniestros de tránsito, la Semana de la Seguridad Vial, así como otros vinculados con la salud.
Esto denota una ausencia total de la Intendencia de Paysandú en lo que respecta a políticas claras, concretas y sostenidas en materia de tránsito, con una Dirección de Tránsito inoperante, pasiva y enemiga de los datos estadísticos -o al menos de hacerlos públicos-, más ocupada en tratar de solucionar graves problemas internos que la aquejan que en trabajar en pos de la seguridad vial.
Como ya lo hemos señalado en más de una oportunidad, es curioso que esto no ocurra porque poco se puede entender de este “divorcio” entre la Intendencia de Paysandú y la UNASEV cuando se supondría que, al ser de igual “palo” político, los objetivos y las políticas deberían de apoyarse, compartirse y llevarse en forma conjunta o ir acompasadas. Pero, lamentablemente, esto no está ocurriendo. Ni siquiera pudo lograrse algo con aquella intentona que hiciera una edila con una moción presentada ante la Junta Departamental que bien pudieron llevar a cabo.
En nuestra opinión nos parece que más allá del color político del gobierno de turno es importante no perder de vista que la seguridad vial, o más bien la siniestralidad vial, constituye una problemática grave que no sólo atañe al tránsito sino que es un tema de salud de la población y que debiera considerarse como una política de Estado, como política departamental sólida. Además consideramos que se pierde otra buena oportunidad para llamar a la cordura, la concientización y la sensibilización de los sanduceros y sanduceras respecto a los siniestros de tránsito y sus víctimas, buscando sensibilidad e involucramiento ante un tema primordial.
Esc. Leonardo Rivero
