“Cuando comento en Montevideo, por ejemplo en los comité de base, que en algunos lugares del interior hay persecución a los frenteamplistas, los compañeros se sorprenden, no lo pueden creer, pero la verdad es que esto pasa”, denunció el precandidato a presidente por el Frente Amplio, Andrés Lima.
“Hay pueblos en los que no hay una bandera del Frente Amplio pero hay votantes del Frente Amplio”, graficó y relató que, “aunque no lo puedan creer, en algunas localidades me pasa que para poder contarle a una familia nuestra propuesta tengo que entrar a la vivienda sin que los vecinos sepan que estoy y retirarme de la misma manera, por supuesto que sin que queden registros de esa visita, sin fotos. Esto porque la gente quiere votar al Frente Amplio pero en algunos casos sigue teniendo miedo; como si estuviéramos en dictadura, uno tiene que reunirse sin que se entere el patrón, sin que se entere la intendencia”.
Ese control que resulta intimidante es ejercido por referentes de los partidos de derecha, en algunos casos desde el propio ejercicio del gobierno, relató Lima y ejemplificó que “en muchos lugares del interior a la gente que se identifica con el Frente, con nuestro espacio el ENFA, pero seguramente también les pasará a otros sectores, inmediatamente cae algún referente de la coalición, especialmente del Partido Nacional, con promesas”. Hace algunos días, desde sectores sanduceros afines a la precandidatura del intendente de Salto se denunció que miembros de familias que colocaron cartelería de apoyo a tal opción electoral recibieron promesas de trabajo en la fundación que provee de mano de obra a la comuna.
“Parece mentira que en 2024, a casi 40 años de caída la dictadura, haya persecución de frenteamplistas, que no se respete cuando alguien se identifica, que por el solo hecho de querer acompañar alguna de las opciones del FA, a partir de ese momento, se lo trate distinto, se le cierren puertas, se le cierren oportunidades, hasta perder el trabajo”, sostuvo el abogado. Añadió que situaciones de ese tenor se dan tanto en el ámbito privado como en el público. “En el caso de los públicos, el que tiene un contrato zafral y se identifica como frenteamplista corre el riesgo de que no se le renueve el contrato”, lamentó.
En diálogo con el programa La Tribu de Contacto FM de Paysandú, Lima exhortó a “no creer en las promesas de quienes no cumplieron”, “no quedarnos con los últimos 15 minutos del partido. Tengamos presente lo que ha ocurrido en estos cuatro años, que no nos vuelvan a usar con promesas de soluciones mágicas en materia de seguridad, en la generación de empleo y tantas otras cosas que la realidad muestra no se cumplieron; no nos olvidemos”, insistió.